MAMBRÚ SE FUE A LA GUERRA
A nadie asombró ni asustó que el Sr. Trump cambiara el nombre del Pentágono a Departamento de Guerra; asumimos que es el “espíritu del tiempo”, como dijo Hegel de Napoleón: “El espíritu del mundo concentrado en un punto, sobre un caballo”; ahora podemos decir: “Montado en un misil nuclear”. ¿La guerra, la violencia, serán los signos de nuestra época?.
Álvaro García Linera, en “La Comunidad Ilusoria”, argumenta que terminada la utopía neoliberal, nos encontramos en un presente agobiante sin futuro redentor a la vista; sabemos de donde venimos, pero no sabemos que vendrá; es quizá lo que Marx le decía de su época a Engels, frente a sendas cervezas en un Pub londinense: “Es el espíritu de una época sin espíritu”. García Linera, en modo pitoniso, profetiza varios escenarios:
Rebrote más agresivo del capitalismo, tipo neoliberalismo soberanista a lo Trump y muchos más lideres políticos; Erdogan (Turquía), Modi (India), Meloni (Italia), Orban (Hungría), Bolssonaro (Brasil), Netanyahu (Israel), Milei (Argentina), Putin (Rusia), Xi JInping (China), etc.
Consolidación de gobiernos progresistas con pálidas reformas y una mezcla de proteccionismo y libre mercado bien organizado: México (hoy), Brasil, Chile, Colombia… (en Bolivia acaba de ser derrotado).
Surgimiento de un Socialismo participativo. Esto según Thomas Piketty, consiste en repartir la riqueza a través de dos mecanismos: (a) un nuevo impuesto progresivo sobre el patrimonio cuya recaudación financiaría una dotación básica y universal de riqueza a recibir a los 25 años y, (b) ampliando hasta el 50% los derechos de voto de los trabajadores en los consejos de administración de las empresas tras facilitarles el acceso a la propiedad mediante compra de acciones. (con todo respeto para Picktty, pero para esto será necesario una revolución).
Miguel Urbán en su reciente ensayo "Trumpismos: Neoliberales y autoritarios, radiografía de la derecha radical", hace un repaso del primer escenario dibujado por García Linera: (a) no es un rebrote neofacista, a estos les da por las pasiones movilizadoras; sacar a las masas a las calles, ponerles camisas negras o pardas y atacar a los enemigos; (b) es más bien el resurgimiento del Autoritarismo Reaccionario, de mantener quieta a la población, desmovilizada por el miedo a los diferentes, los musulmanes, los migrantes, los narcos; defender a ultranza el patriarcado contra los peligros de los movimientos emergentes del feminismo, diversidad sexual; negar la crisis ambiental, el cambio climático y atacar a los ambientalistas.
Así que el nuevo Departamento de Guerra de Trump (será Secretaría de Guerra cuando lo apruebe el Parlamento), está dentro de la perspectiva del “Autoritarismo Reaccionario”, tal como lo dijo el nuevo Secretario de Guerra Pete Hegseth, al opinar sobre el cambio: “Hemos recuperado el espíritu guerrero, queremos guerreros, gente que sepa como aniquilar al enemigo”.
Amin Maalouf en su “Naufragio de las civilizaciones”, se lamenta, ahora que con el desarrollo tecnológico tenemos casi todo para vivir mejor, estamos a punto de destruirlo todo, de ahí su metáfora marinera del naufragio. ¿Hemos fallado como Homo sapiens? ¿A que rumbo de la humanidad le apuesta usted?.
Trump y lel Secretario de Guerra
El Presidente de EEUU muestra, con su típico gesto altanero, el documento donde ordena el cambio de nombre del Pentágono a Departamento de Guerra, será Secretaría cuando lo apruebe el Senado. "Hemos recuperado el espíritu guerrero, gente que sabe como aniquilar al enemigo". dice el sonriente y flamnte Secretario de Guerra Pete Hegseth.
Trump: los muertos de las dos guerras mundiales.
Quizá el mejor libro antiguerra, de todas las guerras de cualquier tipo, sea "El Mundo de Ayer" de Stefan Zweig, vivió las dos grandes guerras.Perseguido por los nazis termino suicidándose en 1942. en un pueblo remoto de Brasil.