ANATOMÍA DE UNA FOTO: LAS DOS SOBERANÍAS
Manteles rojos; al frente los ojos, oídos, músculo y cerebro de la República: los tres ejércitos nacionales (Sedena, Marina y Guardia Nacional), el Comisario Federal de la Policía (el guapo del Gabinete), la Secretaria de Gobernación, la Fiscala de la República, dos mujeres que cumplen funciones de coordinación en seguridad Pública, Marcela Fregoso (de pantalón Bonchi) y Laura Velazco, a un lado de la inconfundible Ernestina Godoy; al centro, la Jefa de Todos, la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y en filas laterales los 32 gobernadores de los Estados libres y soberanos del territorio patrio.
De acuerdo con el Antropólogo Claudio Lomnitz, todos ellos serían representantes de la Soberanía legal o Positiva de la República Mexicana; responsables de los destinos del país y de la protección de la vida de sus ciudadanos. Eso dice la Constitución.
La terca e imperfecta realidad dice que hay otra soberanía y que el mismo Lomnitz, denomina “Soberanía ilegal o negativa”, Es la soberanía para matar y desaparecer, ejercida por 16 grandes cárteles con capacidad para trasladar droga a EEUU. La diferencia es que esta “Soberanía negativa”, es difusa, no tiene un mando único, ni un centro geográfico de donde irradie el poder; sino que se distribuye en cada zona donde un jefe Capo, un Patrón, un Señor Feudal, ejerce lo que la Doctora en Criminología Lorena Cortés Villaseñor, denomina “Gobernanza Criminal”; cada región está gobernada por esos “Señores Pesados”, puede haber alianzas, pero es más común las disputas por el territorio; incluso discrepan en su teología política, por ejemplo los Zetas veneran a la Santa muerte; los del Cártel del Golfo a San Juditas, los de Sinaloa a Malverde, etc.
Entonces, la realidad política del país nos dice que hay dos Soberanías en pugna: A) La legal o positiva del Estado y B) la Ilegal o negativa del Crimen Organizado; en medio, estamos nosotros, los ciudadanos, que ponemos los muertos, los desaparecidos; pagamos piso y las extorsiones. Veamos un ejemplo: la madrugada del domingo 7 de diciembre, en la Colonia Sixto Osuna de la Sindicatura de Villa Unión, a 25 minutos de Mazatlán, “El Señor Feudal” de la Zona, ordenó atacar la vivienda de una pareja de Contratistas de Jornaleros Agrícolas, que se negaron a seguir siendo extorsionados; la pareja se defendió también con las armas, el tiroteo duró de las tres a las seis de la mañana, hasta que fue incendiada la casa y asesinados Vicente y Gaby, la pareja de numantinos de Villa Unión. Fueron inútiles las llamadas al 911, nunca llegaron ni el Comando de Acción Rápida del Ejército “Los Murciélagos”, mucho menos las policías estatales y municipales. La Fiscala dice que se indagará si hubo omisión. Esta demostración de poder de fuego y la impunidad de la acción, no solo es para castigar a un súbdito que se niega a pagar, sino para infundir el terror: “Pagas o mueres, he ahí la cuestión”.
Otra realidad que nos negamos a aceptar es que la economía nacional está fuertemente narcotizada; el dinero de las actividades ilícitas circula libremente en el país y suple las raquíticas finanzas del Estado Mexicano, es decir, el Gobierno Federal no tiene dinero para invertir en el desarrollo, por varias razones : (1) la deuda pública es ya de 20 billones de pesos y en el 2026 se pagarán de abonos e intereses Un billón, 600 mil millones de pesos; (2) México es el país que cobra menos impuestos y no grava a las grandes fortunas. por esas dos razones, las arcas de la nación están flacas y parcas.
Solución, si en verdad se quiere eliminar al Crimen Organizado, no bastarán Comandos de Élite y más armas poderosas, es necesario y urgente: 1. Suspender el pago de la Deuda Pública y someterla a una efectiva Auditoría Forense que elimine préstamos contraídos mediante tratos corruptos; 2. Una Reforma Fiscal Progresiva y gravar las grandes fortunas. Solo así sonara la plata en la tesorería y habrá dinero para rescatar el campo, la pesca, la minería, la vivienda urbana…Y cortar el cordón umbilical con la economía ilícita del crimen organizado.
En la foto del recuerdo, todos están mirando el Dron que captará su imagen; se ven bonitos, disciplinados, pero ustedes han de disculpar: lo que saben, averiguan y discuten, como le dijo Don Quijote a nuestro admirado Sancho: “no importan un ardite al entendimiento ni a la memoria". Es decir, no están analizando ni acordando lo que en verdad importa. Han, pues, de Disculpar.
La foto del Recuerdo de una de las tantas reuniones del Consejo Nacional de Seguridad Pública, se ven muy bonitos, formalitos; pero han de disculpar: no discuten ni acuerdan lo que en verdad importa.
La casa acribillada e incendiada. El tiroteo duró tres horas, la pareja la defendió como los Numantinos de Cervantes, resistieron hasta su muerte. Las fuerzas armadas llegaron a poner la cinta amarilla y contar los casquillos percutidos.

